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20 de Junio
¿Cuántas veces no hemos tenido dudas sobre el embarazo, la anticoncepción o hasta sobre el placer?, y más común aún ¿cuántas de estas veces no tenemos con quien dialogar por miedo o vergüenza? Pues estos aspectos de tu sexualidad hacen parte de tu salud sexual y no debes tener ningún miedo al hablar de ella, es más, ¡debes hablarlo!
La salud sexual y reproductiva es un conjunto de derechos que buscan garantizar tu bienestar integral relacionado a los temas que involucran el sistema reproductivo y la sexualidad. Es el derecho que tenemos las mujeres a disfrutar de una vida sexual placentera y sin riesgos, con la libertad de decidir por nosotras mismas lo que queremos y cuando lo queremos. Decisiones como tener relaciones sexuales, ser madres o no serlo, entre otras elecciones, además de conocer las herramientas a las que tenemos derecho a acceder.
Conocer sobre tu salud sexual y reproductiva es cerciorarte de que tus derechos están siendo respetados, garantizando asi tu bienestar físico y mental. Por eso Nosotras resolveremos todas tus dudas.
Es tu derecho a vivir tu sexualidad y relaciones sexuales, libre de discriminaciones, agresiones o alguna coacción. Esto implica tu sexo, identidad, tu orientación y todos los aspectos en los que tu sexualidad se ve expresada.
En cuanto a la salud reproductiva, es el derecho que tienes a decidir sobre la concepción, si la deseas o no, esto implica la garantía al acceso que debes tener a los anticonceptivos, orientación médica y a un buen servicio de salud que te permita, si es lo que deseas, llevar un embarazo sano y parir sin ningún riesgo.
Los derechos sexuales y reproductivos forman parte de los derechos humanos y están amparados tanto internacional como nacionalmente, esto quiere decir que todos los Estados deben velar por que estos derechos se cumplan. Estos son tus principales derechos:
El acceso a la información y servicios de salud dignos que garanticen tu bienestar sexual y reproductivo.
La orientación y libre elección en cuanto a métodos de planificación.
Libertad sexual, es decir, vivir tu orientación, sexo, preferencias, entre otros, libre de discriminaciones.
Autonomía para disfrutar tu sexualidad y tener el control de tu cuerpo, sin sufrir agresiones, violaciones o mutilaciones
En conclusión, estos derechos confirman que solo tú tienes el control de tu cuerpo, cuídalo y haz valer sus derechos.
Todos debemos conocer cuáles son nuestros derechos para evitar que se vulneren, y en el caso de la salud sexual y reproductiva es aún más importante para todas las personas. Pero seamos sinceras, como mujeres la palabra sexualidad sigue despertando pudor y cierto tabú, por esto se vuelve más complicado al momento de reclamar ciertos servicios a los cuales debemos tener acceso por derecho.
Por ejemplo, hablar de anticoncepción femenina en un hogar es un tema que muchas veces es difícil de tocar y a veces imposible. También sucede cuando se quiere hablar de placer femenino. Otro ejemplo es cuando mujeres aún en época fértil desean realizarse una cirugía para no tener hijos, en ocasiones su decisión es juzgada ya que se tiene el imaginario de que el propósito de todas las mujeres es ser madre.
Vivimos nuestra salud sexual y reproductiva en un contexto en el cual, por tomar nuestras propias decisiones, es posible que seamos juzgadas. Por eso es de suma importancia conocer sobre estos derechos y así poder exigirlos.
Lo primero es que te sientas en total libertad de manifestar cualquier duda que tengas, así descubrirás cada vez más sobre cómo llevar una vida sexual y reproductiva saludable, con el acompañamiento adecuado.
Buscar información y orientación va a asegurar que disfrutes tu sexualidad sanamente, tomando las medidas necesarias según sea el caso. Cómo planificar para evitar embarazos no deseados o si es el caso, informarte sobre cómo llevar un embarazo de la mejor manera con los cuidados requeridos y cuáles son las garantías a las que tienes derecho.
Además recuerda que para cuidar tu vida sexual y reproductiva se requiere de mucha responsabilidad, debes hacer chequeos médicos frecuentes para asegurarte de que todo esté bien, descartar alguna ETS, problemas con tu fertilidad, trastornos en tu ciclo menstrual, en general, descartar cualquier problema que impida llevar una vida sexual y reproductiva sana.
El consentimiento es una de las cosas más importantes en tu salud sexual, en específico en tus relaciones sexuales. Como te lo hemos dicho tu eres quien decide sobre tu cuerpo, tú decides el momento y la manera en la quieres llevar el acto, sin vulnerar los derechos del otro.
No importa si ya ha sucedido antes o si dices que sí y luego te retractas, eres tú quien tiene la última palabra y si una persona no respeta tus límites está vulnerando tus derechos, no temas ser firme cuando de hacerlos respetar se trata.
Sabes que con Nosotras siempre encontrarás un lugar seguro para hablar sin tabúes y seguir informándote, además recuerda que siempre habrá personas que te orienten de la mejor manera, solo debes buscarlas.
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